Dicen que uno no escoge la vocación…

¡La vocación lo escoge a uno! y como no ser así, si es impartida por Dios, y así fue conmigo: la psicología me encontró cuando entendí que acompañar a otros a sanar no era solo un trabajo era una misión de vida.

Soy psicóloga especializada en psicología positiva y psicología católica, con una maestría a alta dirección y más de 15 años de experiencia acompañando a adultos en procesos de sanción emocional, desarrollo personal y crecimiento espiritual.

Me apasiona ayudar a curar y aliviar la dolencias del alma acompañando a las personas en su conocimiento interior.
Ayudando a comprender tu mente, cuerpo, historia emocional y también tu camino espiritual.
Porque sanar no es solo llorar, también es reír, perdonar, abrazar y redescubrirse.

Siempre he creído en Dios, pero mis años de formación como psicóloga me llevaron a alejarme de Él, cuestionar su existencia y así entrar a uno de las sequías más fuertes que he tenido en mi vida. Tiempo después mi padre fallece y sentí que mi vida ya no tenía sentido, no tenía que sostenerme y la sola ciencia no me daba las respuestas que yo necesitaba, fue cuando Dios envía sus ángeles para mostrarme que no estaba sola y así es como inicia mi camino, en reconciliar mi fe y la ciencia, para que hoy en día esté convencida que la ciencia y la fe no es excluyente ¡Se potencian!.

Encontré dos bellas especialidades de la psicología ambas con rigor científico y esa integral idas que tanto buscaba.
La psicología positiva que se centra en explorar las fortalezas, virtudes y experiencias positivas buscando comprender y fomentar la felicidad, el bienestar y el florecimiento humano.

La psicología católica buscando comprender la psique humana desde una perspectiva integral y espiritual considerando a cada persona como una unidad de cuerpo, alma y espíritu creado a imagen y semejanza de Dios.
Es así que al integrar estas dos especialidades de psicología, son un acto de amor y de esperanza, una forma de tocar el alma sin juicios y con verdad.

A lo largo de estos años he creado clases y espacios que invitan a reflexionar, reír, llorar y crecer. Sobre autoestima (Cristoestima) vínculos con mamá y papá, autoestima, hábitos, relaciones saludables, oración y muchas más para el crecimiento y desarrollo personal.

Siempre con una mirada integradora que une lo espiritual, emocional y lo práctico.

Mi misión es ayudarte a sacar tu mejor versión, no es perfecta (porque esa no existe); si no la auténtica: la que se reconcilia con su historia, se abraza con amor y camina con Dios hacia una vida más plena, más libre y más feliz.

¡Bienvenido (a) a este espacio.
Aquí estoy para caminar contigo.